PERSONA(L)
Artistas:
Mara Alonso, Aitor Laspiur, Aitana Valencia
Fechas: 9 – 21 de septiembre, 2024
Comisaria: Marta Levenfeld y Queca Levenfeld
Desde tiempos inmemorables la fotografía de la industria de la moda ha identificado a la figura femenina como instrumento hacia el consumo del producto.
Esta teoría en la práctica vuelca el cuerpo femenino, primeramente, como “aquello que se acomoda a la prenda”, a la simetría, a la inmovilidad. El concepto de maniquí. Con el paso de las décadas y, por supuesto, de la propia evolución de la moda, la fotografía se adapta a ella sustituyendo la quietud por el del movimiento: ahora es la modelo quien es acompañada por la prenda, ella es la protagonista y no un mero accesorio. Esta transformación se hizo aún más evidente a partir de los 90’. Las supermodelos toman el foco, se convierten en la referencia, el culmen. Son mujeres inspiradoras. Por ende, la sexualización de la mujer a través de la gran mayoría de campañas de publicidad, sobre todo a partir de los 2000, se hace con la fotografía de la época. Añadir, que este erotismo no está direccionado hacia cualquier mujer, si no hacia un tipo de cuerpo convertido en objeto de deseo. “Si deseas mi cuerpo, mujer, compra este vestido. Si deseas consumir mi cuerpo, hombre, compra este perfume”.
En contraposición a estos hechos surgen fotógrafas como Sarah Moon o Nal Golding destacando como pioneras y alejándose de la mirada masculina, creando atmósferas más etéreas o underground.
La rapidez del crecimiento del movimiento feminista en el mundo occidental nos afecta desde hace muchos años, aunque, solo desde hace unos pocos, y de forma más normalizada, a la belleza femenina como algo individual. Movimientos sociales como Me Too, que visibilizan y combaten el acoso, se erigen como los responsables directos en los nuevos cambios culturales que avanzan en pro de la igualdad y el respeto. Surgen así nuevos cánones que no acompañan a un solo tipo de belleza y proporción y que huyen de cualquier estereotipo hegemónico que hayan situado a la mujer como un prototipo específico y objeto sexual. Este nuevo concepto invita al medio fotográfico a crecer dentro de una misma comunidad y dentro de cualquier tipo de género, donde pueden convivir identidades propias. Destacar corrientes como el “Feísmo” que han surgido en el arte a lo largo de la historia, añadiendo ahora a la fotografía, herramienta arquetipo de representación de la realidad como es, a ejercer su tarea: capturar en cualquiera de sus estilos la verdad de las personas. Esta nueva verdad es la que acerca al espectador y al futuro consumidor a buscar una identificación más allá del producto objeto de la campaña publicitaria. Destacamos, también, otros ejemplos de estas nuevas miradas, como la de Vivian Sassen, que, difuminando la frontera de la realidad, borra la identidad del sujeto y explora la relación del individuo con su entorno. O, Ryan McGinley, el cual deja de sexualizar el cuerpo para verlo con una honestidad que convierte lo cotidiano en algo novedoso. Otras personalidades en la escena de la fotografía publicitaria y de moda serían, Juliette Cassidy que destaca por sus proyectos elaboradísimos de carácter narrativo y onírico, o el trabajo de la británica Elaine Constantine cuyo trabajo destaca por el ensalzamiento de la juventud, gracias a la frescura, uso de colores brillantes y emoción que reflejan sus imágenes siempre inspiradas en el entorno más cotidiano.
Todas ellas, y otros, han iniciado un nuevo lenguaje visual que más allá de marcar procedimientos concretos e inamovibles potencia la exploración de nuevas maneras invitando a las futuras generaciones a desarrollar su propio estilo y, en ningún caso, condicionado por modelos prestablecidos.
Este inicio de temporada, Espacio MAdos inaugura su nuevo ciclo de exposiciones con la muestra colectiva formada por los fotógrafos Mara Alonso, Aitor Laspiur y Aitana Valencia bajo el título Persona(L). Procedentes del mundo profesional de la fotografía de moda nos invitan a detenernos en sus proyectos más personales.
Mara Alonso (Granada,1989) es Licenciada en Comunicación Audiovisual y Master de Fotografía de Moda y Publicidad.
Ha realizado trabajos para firmas como Loewe o Massimo Dutti, o revistas como Vogue y Harper’s Bazaar, entre otras.
Forjó desde sus cuatro años una relación profunda con la danza. Tanto es así, que sus primeras fotografías fueron dedicadas a sus compañeras bailarinas.
Fue en el inicio de sus estudios en audiovisuales cuando despertó en ella el interés por la imagen publicitaria y, al llegar a Madrid, cuando descubre, que la danza sería uno de los caminos para crear y narrar historias relacionadas con la moda.
A partir de sus años como asistente en Madrid y Londres, va concretando las técnicas con las que se identifica al descubrir a sus referentes. Empieza así a realizar fotografías con modelos buscando la naturalidad y lo espontáneo. Además, la luz del atardecer siempre le ha servido como fuente de inspiración fotografiando las sombras de su propio cuerpo y observando así, el movimiento y la luz. Lo ecléctico y el color son patrones que se repiten, permitiendo que distintas imágenes cuenten una misma historia al tiempo de entablar un diálogo entre ellas.
Aitor Laspiur (Eibar, 1996), fotógrafo para revistas como King Kong Magazine, Le Mile Magazine, o Dust Magazine, se ha interesado por la fotografía y el video desde pequeño.
Adoptó inmediatamente un enfoque muy personal de la fotografía, dirigiendo su objetivo hacia su entorno más próximo para conocerla mejor. Son, su prima Paula de 7 años y familia, los primeros protagonistas de sus imágenes. Trabaja en este proyecto desde hace cinco años y plantea terminarlo cuando Paula llegue a la adolescencia.
Esta mirada introspectiva, permite al artista explorar su infancia y el período crucial de la transición de la adolescencia a la edad adulta. Evolucionando en este ámbito íntimo y personal, comienza a captar la mirada sincera y delicada de sus modelos, siempre guiado por la cercanía y la autenticidad. Tomando prestados los códigos de la fotografía de moda, cultiva la importancia del vínculo profundo entre sus sujetos y su entorno con composiciones minimalistas y poéticas que emanan una atmósfera cinematográfica.
Además de los trabajos ya mencionados, también ha sido fotógrafo para revistas como Dust Magazine, King Kong Magazine, Boycott Magazine, Common Language Magazine, y trabajado con marcas como Camper, Pepa Salazar, Mans Concept, Loreak Mendian, Aitor Goikoetxea, etc., además de capturar a artistas como Omar Apollo o Sen Senra.
Aitana Valencia (Alicante, 1993), fotógrafa para revistas como Behind The Blinds, Numerò, The Greatest Magazine, o GQ, y de cortometrajes como La opacidad del agua.
Desarrolló desde la infancia su amor y afición por el arte.
Su inicio y desarrollo en la pintura comenzó influenciada por su madre, pintora de profesión. Continuó sus estudios en Diseño profundizando en la teoría del color y la fotografía.
El color es lo que marca el punto diferencial en su trabajo fotográfico.
Encuentra su inspiración en su entorno más íntimo, observando con detalle lo delicado, lo femenino, lo puro y lo imperfecto, cualidades esenciales para capturar la armonía y la belleza de su mundo. Sus fotografías son un reflejo, tanto consciente como inconsciente, de esa poesía que impregna lo cotidiano.